Este segundo volumen de la colección Debates republicanos en Chile examina algunas de las discusiones más relevantes producidas en el país durante el tránsito del Antiguo Régimen al orden republicano, en las primeras tres décadas del siglo XIX, complementando así el trabajo presentado en la primera entrega de esta serie. En el libro se analizan las polémicas en torno a los siguientes conceptos: constitución, religión, opinión pública, ciudadanía e indígenas.Superado el período de la independencia, Chile entró de lleno en un proceso de consolidación institucional y creación de una nación de ciudadanos. En un escenario políticamente inédito, el debate constitucional resultó central, no solamente respecto a qué elementos debía poseer una buena ley fundamental, sino también respecto a la asignación de derechos y libertades. La religión católica, punto de encuentro entre la trascendencia y la inmanencia, entre el pasado y el futuro, era escrutada para responder a las preguntas sobre el rol de una Iglesia que debía acomodarse a un Estado que reclamaba para sí la autoridad sobre los asuntos públicos. Una incipiente opinión pública, novedoso espacio de legitimidad del poder, en tanto expresaba teóricamente la voluntad popular, fue el marco desde el cual fueron pensadas y debatidas nuevas temáticas, tales como las formas de concretar los principios de soberanía popular, igualdad y representación. Inevitablemente, las respuestas a estas interrogantes tuvieron su momento de elucidación más explícita en el debate sobre la ciudadanía, que definió problemáticamente el conjunto de quienes componían activamente el nuevo orden republicano. La república fue desafiada a pensar la diversidad de sus habitantes, incluyendo a los indígenas, conceptualizados en un estatuto de alteridad al menos ambiguo en la época aquí examinada, dando inicio a un largo recorrido y a un cuestionamiento de larga duración sobre los integrantes de la nueva comunidad política formada en este período de tránsito entre la tradición y la modernidad.